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Como preparar tu vehículo para una conducción segura

Para garantizar una conducción segura, el mantenimiento de nuestro vehículo es crucial. Es común descuidar la revisión del coche y la inspección técnica periódica (ITV), pero es importante recordar que un vehículo en mal estado no solo pone en riesgo al conductor, sino también a otros usuarios de la carretera.

¿Como podemos asegurarnos de que nuestro vehículo esté en óptimas condiciones?

  • Neumáticos: los neumáticos deben estar inflados según las recomendaciones del fabricante y no deben presentar desgastes en la banda de rodadura que puedan provocar fallos o accidentes.
  • Niveles de líquidos: es fundamental revisar los niveles de aceite, anticongelante y líquido de limpiaparabrisas.
  • Escobillas: verificar que las escobillas delanteras y traseras estén en buen estado para un correcto funcionamiento. Asiento, espejos y cinturón de seguridad: ajustar y revisar estos elementos antes de conducir.
  • Amortiguadores: si el coche se mueve demasiado al pasar por baches o se escuchan ruidos extraños, es posible que los amortiguadores estén desgastados y necesiten ser reemplazados para garantizar la estabilidad del vehículo.
  • Frenos: revisar el estado de los discos y pastillas de freno al menos una vez al mes, además de comprobar el nivel del líquido de frenos.
  • Luces: las luces del vehículo son importantes para indicar nuestra posición en todo momento y, con el tiempo, pueden desgastarse y perder intensidad. Es especialmente importante revisar las luces de las motocicletas, ya que solo disponen de una luz trasera y su visibilidad se ve reducida si no funciona correctamente.
  • Sistema de señalización de emergencia: tener a tu disposición un dispositivo de señalización en caso de siniestro es indispensable. Actualmente, los triángulos de emergencia son los más comunes, aunque disponer de una de las nuevas balizas de emergencia conectadas supone una clara inversión en la mejora de tu seguridad en carretera, facilitándote no solo el hecho de no tener que salir del coche, sino también de poder conectarte a la red de tráfico y proporcionar una circulación óptima y segura para todos.

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